Automovilismo de velocidad (versión definitiva)

Universidade de Brasília

Instituto de Letras

Departamento de Línguas Estrangeiras e Tradução

Disciplina: TPEOE III – 2º/2017

Profesor: Juan Rojas

Alunos: Laís Antunes     -   matrícula:  16/0130280

        Cynara Menezes – matrícula: 16/0057884

        Adriano Mendes –  matrícula: 16/0109159

AUTOMOVILISMO DE VELOCIDAD

Esta modalidad de automovilismo se disputa en circuitos pavimentados, en un formato de carrera, en que la idea es girar un número determinado de vueltas en el menor tiempo posible, o bien girar la mayor cantidad de vueltas posible en un tiempo determinado.

Ayrton Senna da Silva fue un piloto de automovilismo de velocidad brasileño que consiguió muchas victorias. Está entre los más exitosos pilotos del mundo.

Nació en São Paulo, en el barrio de Santana, el 21 de marzo de 1960. Vivía con su familia: su padre, Milton, y su madre, Neide, y sus dos hermanos: una hermana tres años mayor, Viviane, y otro hermano, Leonardo. Tenía tres sobrinos, hijos de Viviane: Bianca, Bruno y Paula.

Ayrton era un niño alegre, le encantaba jugar al fútbol. Era hincha de Corinthians. Cuando cumplió 4 (cuatro) años, su padre le regaló un “kart”. Fue una gran alegría.

Su padre, que tenía una fábrica grande de repuestos de coches, le construyó un carro, y Ayrton lo condujo alrededor de su jardín y en los parques de São Paulo. A los diez años ya tenía un “kart” mejor preparado y más potente. Quiso, entonces, participar de una carrera pero desafortunadamente la edad mínima para hacerlo era de 13(trece) años. Sin embargo, siguió practicando y cuando cumplió los 13 (trece) años compitió por primera vez en la pista de Interlagos, en São Paulo. Senna ganó el título brasileño cuatro veces y, en 1977, ganó el título sudamericano. Ese fue el primero de muchos triunfos. Participó en diferentes categorías hasta llegar a la Fórmula Uno, donde obtuvo 41 (cuarenta y una) victorias, 65 (sesenta y cinco) “pole positions” y 3 (tres) campeonatos mundiales.

Murió el primero de mayo de 1994, durante una carrera en el circuito de Imola, en Italia, al chocar su coche contra un muro. Cuando murió, ya se había convertido en un excelente piloto. En las pistas dejó un legado que, hoy en día, los que tuvieron oportunidad de verlo tripular su bólido o conocer su trayectoria no pueden olvidar.

Pasó a la historia y a las páginas de oro de la Fórmula Uno por su coraje, por su entrega, por su manera de conducir y por sus grandes dotes de ser humano.